Ojalá..., ojalá que
respiraras de mí, ojalá y esta historia se escribiera de otra manera, ojalá yo fuera la única…, ojalá
pudieras entrar en mí, mirar y sentir todo lo que he guardado para ti, ojalá…
Ojalá es la palabra correcta,
siempre caigo en un shock cuando estas y después regreso a la realidad cuando
te marchas; a esa realidad donde un ojalá es una posibilidad, donde en mi corazón
se vuelve una promesa, así, sin mucho sentido, una posibilidad que me mantiene
flotando en el océano de tu mañana, el ojalá se ha vuelto mi salvavidas en estos tiempos, sí, he
entendido que esa palabra es el salvavidas de los eternos enamorados.
Así que ojalá y nos volvamos a
encontrar...