Y cuando quieras escribir,
escribirás sin que nada logre importante y sin que nadie logre detenerte,
porque la magia no está en un aparato, o sobre una silla, la magia la tiene tu
imaginación, es ella la que hace danzar a los dedos al compás de tu ilusión…
Mientras bebo una taza de café
que no debería beber, pensando en los amores, en el presente, en el pasado, he
decidido escribir una vez más imaginando…
La música de mis oídos ha
recordado los buenos cuentos que aquí he podido contar, y no sé qué ha pasado
con todos esos protagonistas, pero el día de hoy que hace tanto frío mi
corazón se vistió de calor y decidido recordar a todos lo que me regalaron su
tiempo y su amor, y esperando que sus vidas sean tan fabulosas como la mía, me
tomo el atrevimiento de recordarlos en este post.
No se preocupen, no los
busco porque tenga una necesidad, estoy aquí acariciando su recuerdo porque
este frío es tan helado que me hizo recordar los inviernos pasados, esos que
alguna vez pase a solas.
Por alguna razón que
desconozco, no había depurado del todo mi correo y ahí en lo oculto del menú, me
encontré con una carpeta, que tristemente llame “nunca más” en ella había correos de algunos de mis
buenos amores, y fue divertido leer cada una de las cosas que alguna vez me
escribieron y que hoy compartiré en el anonimato y sin intención de dañar nadie.
Un primer beso que se quedó
en una aventura de una tarde con el chico (en ese momento más apuesto de la
prepa), un convivio con un sueño que se hacía realidad y un amor que se esfumo
de la misma forma que llego, el corazón de una quinceañera que quería ser mujer
y el alma de una niña que se negó a morir en aquel 1997.
Muchos sueños de ficción acompañaron
mis pasos ninguno se hizo real, después de todo cuando la luna decide
ocultarse, por más bueno que sea el telescopio, ella no se dejara ver hasta que
el nuevo ciclo llegue con la calma.
Amores maduros, nada real,
nada que mi decencia y mi predilección por mis valores fuese dañada, y si bien
es cierto que en cada capítulo tuve la oportunidad de hacer realidad un sueño, también
es cierto que la idea de ser el calvario de otra y hacer las cosas en lo oculto no van conmigo. Y
ahora que lo pienso tal vez no era amor, tal vez solo necesitaba sentirme
amada, tal vez no quería estar sola.
“cuídate por ti y para mi”
es una frase muy buena, debo reconocer, que cuando la leí por primera vez llego a mover fibras que nunca nadie había
movido y es que como te defiendes ante el primer gran amor, como no derretirte
ante tal declaración, ante el por ti y para mi…
Ustedes lo saben, ese fue
el amor más angustioso, más lastimoso y egoísta que pude encontrar, pero también
fue intenso, duradero, creativo y
pasional, un amor que aún recorre las páginas de este blog buscando un no
sé qué, añorando un tal vez?... no lo sé, tan solo me he detenido a contar las
veces que paso por aquí, cuantas serian que después de 10 minutos me canse de
contar.
De esta historia hay mucho
que leer, sería necesario ir a la primera página de este blog para poder entender.
“y cuando vuelvas a leer
estas líneas volveré a ti” si así es como creí que sería este amor, así es como
pensé que pasaría, porque durante muchos años esa había sido la historia, él se
iba, yo me quedaba, él volvía y yo regresaba… hasta que un día la noche me sorprendió
y un ángel montado sobre un elefante llego a mí de madrugada e hizo lo que ningún
“amor” intermedio logro, este ángel
desplego sus alas y mis ojos nunca más volvieron a mirar atrás.
Estuvo y ha estado desde
entonces, justo ahora que escribo y le leo al mismo tiempo, es mi inspiración y mi
aliento es esa historia que sigo contando…
El recuerdo y el recuento
es solo eso, es tan solo para que los dedos se desentuman, para que se
calienten y den paso a una nueva temporada en este espacio que ha sido de todos
desde que fue abierto para mí.
Ahora si estoy de regreso y
espero que por mucho tiempo.
P.D. por más que hubiera
querido dejar de escribir, es imposible… hacer esto es como respirar para mí, está
aquí y recorre cada parte de mí, ahora solo espero que les guste y si están por
ahí y tienen unos minutos para mí me gustaría que me hagan saber que siguen
aquí, esperando por mí.