Recuerdos de algún día, en algún lugar…

Lo primero que hare al iniciar esta entrada es saludar a todas aquellas personas que me siguen a pesar de que he tardado  mucho en subir  nuevas entradas, pero la buena noticia es que a pesar de todo   el viejo y conocido refrán tiene razón “ mas vale tarde que nunca”…

Y pues aquí estoy  de nuevo escribiendo desde mi viejo – si me parece un poco viejo- escritorio, y debo platicarles que acabo de ordenar viejos archivos -de nueva cuenta esa palabrita-, y pues me ha entrado  un poco de nostalgia acompañada de un clásico “yo lo sabia” que me grita desde el fondo de mi archivo muerto; si, el archivo muerto de mi cabeza que fue reabierto para  acomodar las nuevas ideas, y es que me acabo de dar cuenta que los viejos amores  dejan de ser viejos cuando se convierten en verdaderas lecciones de vida, cuando por fin miramos atrás sin rencor, sin suspiros, sin sobresaltos, hoy me di cuenta que los viejos amores se pueden superar al 100 por ciento, y que las viejas tristezas, los malos momentos y las interminables preguntas se convierten conforme entendemos de que se tratan esto de  “las lecciones del amor”, en  aprendizajes para siempre,  algo que se simplifica es una palabra, “avanzar”.

Avanzar, es no sufrir, es no padecer, es dejar de añorar, es saber que el pasado esta por que ya fue vivido y lo que un día fue, ya paso.

Sin embargo  nunca esta de mas recordar, después de todo la vida esta hecha de momentos, y obviamente incluye  los momentos  que algún día se vivieron.

Y así es como comienza esta entrada… y es que es una de las ideas que tenia en mente para subir, “los recuerdos, los detallitos y todas esas cosas que nos recuerdan a nuestros ex”, por que sin lugar a dudas a veces resulta difícil deshacernos de todos los detalles, o de los recuerdos de esos detalles y no necesariamente porque tengan un valor afectivo elevado – eso quero pensar-, sino que simplemente se trata de el apego que le tenemos a las cosas de alguien que alguna vez amamos, y que por mas depuraciones que se hagan -en el mejor de los casos y con todas las ganas de olvidar-, siempre quedan escombros de las relaciones pasadas, y por lo menos esto me ocurre a mi, tengo una caja –enorme- de detallitos acumulados, de regalitos, de recuerdos y cosillas que me recuerdan a los momentos del pasado.

Y el recorrido por los recuerdos conforme avanzamos deja de ser doloroso, para convertirse en un dulce paseo de alguna tarde en algún lugar. Pero lo realmente importante es que los recuerdos no solo son míos, los recuerdos viven en todos, viven en ti que me lees, en la persona que esta al lado tuyo, en las personas que aún no conoces y en él (o ella); sí, él (o ella) también tiene sus propios recuerdos, que seguramente  tiene guardados en algún lugar, al igual que tu o que yo…

Muchos seguramente pensaran que  aquí es donde lanzo la segunda parte de mi post, que aquí es  donde se inserta la siguiente pregunta, ¿qué pasaría si pudieras ver los  recuerdos de la persona que amas?, ¿él o ella a pesar de  el tiempo habrá logrado avanzar o superar a sus amores pasados?, es decir, todos cargamos con una historia, todos tenemos días  vividos, todos guardamos recuerdos.

Y es lógico y natural interesarte por estas preguntas, es sano  pensar en el ayer,  “porque el ahora se compone en parte del ayer”, ya sabes, lo que decidimos cargar, lo que decidimos dejar, lo que aprendemos y lo que simplemente NUNCA superamos, nos definen en las relaciones que están por suceder o que están sucediendo;  y aquí es donde les pregunto ¿es posible avanzar en una relación nueva cuando aún tienes asuntos pendientes  con tus amores pasados?

En mi muy humilde opinión creo que no, creo que puedes intentar mil relaciones después de  LA RELACION y si no has superado esta, nunca vivirás las mil que vienen a pleno, siempre compararas, habrá una vocecita en tu cabeza que te dirá  que a quien tienes en frente no es suficiente para poder avanzar – y no lo escribo con el afán de ofender-, no, simplemente estoy reflexionando sobre los inconvenientes de no avanzar, sobre el enorme boquete que existe entre avanzar y seguir intentando olvidar, para poder amar a alguien mas.

Amar implica entregarte a pleno a una persona, con todos los sentidos libres y lucidos, es por ello que creo que si amas a alguien para olvidar a otra persona, o que si “crees”  haber olvidado sin de verdad saber que has olvidado, es por que aún no avanzas.

De nada sirve mentirse a uno mismo, engañarse cargando en la bolsa del pantalón las viejas cartas de amor dedicadas a un amor pasado, mientras besas los labios del amor presente; de nada vale creer o fingir, de nada sirve, porque al final la historia nueva, se convertirá en una historia pasada fallida, y lo peor de todo es que el engaño no sólo es propio, el engaño es para alguien mas, que ni siquiera esta enterado de tal escenario, a menos que la honestidad sea la bandera de la nueva relación, y ambos estén al tanto de esta situación.

Hoy se trato de una entrada reflexiva, la razón es que las relaciones siempre son de dos, y tenemos que  tomar en cuenta no solo lo que nosotros pensamos, decimos, suponemos, creemos o sabemos, también y creo yo que es doblemente importante saber lo que la otra parte esta viviendo, pensando, sintiendo y recordando.

Yo me despido amigos, y sigo firme  en mi  frase “enamórense cuantas veces quieran” la razón es, que solo así podrán encontrar a la persona adecuada, a la persona hecha gusto a la medida de sus sueños. Echando a perder se aprende!!! jeje, saludoos, besoos, y muchas gracias por sus visitas.

Nos leemos, la próxima!!!