- Usted ha llegado al tercer piso…, aquí bajo, gracias.

Aún es 19 de marzo, aún tengo 29 años, aún no sé cuándo paso tanto tiempo y lo peor es que  en realidad no sé en que “todo” he gastado  todo ese tiempo. 

He estado pensando en muchas cosas, la mayoría de ellas van encaminadas a lo que me falta por hacer, a todo aquello que aún no he podido (o querido) hacer.

Me surgen muchas  cuestiones  por estas horas, las que más ruido me hacen son las referentes a los amores del pasado, aquel que una vez creyó que “ era muy joven para enamorarme de un hombre demasiado mayor”, recuerdo mucho cuando él tenía demasiado miedo de mi juventud,  y después, como pasa siempre los años pasaron y  ahora que ya no soy tan joven, lo cierto es  que él sigue teniendo muchos más años que yo y seguramente si nos encontráramos ahora, seguiría teniendo miedo, ¿por qué?, simple, aún sigo siendo demasiado joven.

¿Que hay sobre las cosas que aún no vivo?, esas cosas que me han pasado por la cabeza, pero que aún no me he decidido a vivir, que hay sobre lo que reza ese viejo dicho “En esta vida hay que hacer tres cosas: escribir un libro, plantar un árbol y tener un hijo”, es decir, aún  no hay libro (por desgracia), el árbol que algún día ayude a plantar en honor a un ser que partió de este mundo, fue robado y sobre el hijo, bueno, eso lo veo más improbable; ya sé que seguramente están pensando que no soy tan mayor, pero tampoco soy tan joven, cuando miro a mí alrededor, la mayoría de mis amigos de generación tienen familia, hijos y esas cosas, y si bien no es algo que anhele con fervor, si me causa ruido en la cabeza.

Los planes  son muchos, cuando menos los necesarios para caminar a paso tranquilo  esperando llegar a algún lugar, la mayoría de ellos son en solitario y buscando beneficios personales (así es como se juega en los planes ¿o no?), sin embargo, espero que en ese lugar al que pretendo llegar este esa persona especial.

Pasan los minutos y estoy con unas ganas locas de que mis horas previas  a los 30´s  estén llenas de momentos gratos, de consejos sabios, de pasos firmes, de reflexión;  sería bueno cumplir alguna que otra cosa que se haya quedado pendiente, ya saben creo que los cumpleaños son como los años  nuevos de diciembre, sólo que personalizados, la idea es, hacer todo lo que no hice en treinta años en cinco minutos… ¡¡Que locura!!

Este post es algo necesario, algo que desde que inicio marzo sabia que escribiría, y lo confirme cuando una lectora y amiga de la prepa me dijo que este blog, le provocaba hacer cosas, cumplir planes y realizar proyectos (por cierto gracias por el apoyo), el día de hoy soy solo yo en mis últimos escalones antes de llegar al tercer piso, soy yo cuestionándome todo, y es que no tiene caso que me reproche nada, ya no suelo hacer eso con mi sistema nervioso, ahora sólo me analizo, no me juzgo, ni critico, eso es algo que ya paso de moda para mí, es decir es cosa de los 20´s.

Sé que lo anterior se ha leído trágico, o cuando menos angustioso, y si bien es cierto que aún no he hecho algunas cosas,  también debo decir que estos últimos meses he vivido como 10  años juntitos, he hecho cosas que con toda honestidad jamás creí que haría, y cuando sucedieron borre de mi lista más de 20 hojas.

El recuento seria más o menos así:

·         He besado bajo la lluvia.

·         He contado al oído.

·         La oruga salió de su capullo y se convirtió en mariposa.

·         Aprendí que decir te amo implica más que sólo mover los labios.

·         Entendí que amar también es abrazar en las madrugadas.

·         Descubrí que el amor también sabe a crema.

·         Deje de vivir una vida que no era mía.

·         Deje de ser madre, para ser tía.

·         Deje de ser niña, para ser mujer.

·         Camine por la noche después de cantar.

·         Compartí una cama sin temor a dejar de ser yo.

·         He podido dar tantos abrazos y me sorprende la capacidad del corazón para que cada uno sepa mejor que el anterior.

·         He viajado a la luna sin despegar los pies del suelo.

·         He vivió tantas aventuras y es un hecho que seguiré viviéndolas.

El miedo (poco) está ahí, a veces creo que no tengo tiempo, a veces pienso que debería decidirme a modificar el mundo tal cual lo conozco, para aventurarme en esas cosas que la vida te pone para que las sigas, sí, a veces  se me da por pensar que debería seguir la corriente en lugar de luchar contra ella, después de todo creo que ya no tengo edad para ese tipo de juegos, sin embargo, soy más necia de lo que el mundo se puede IMAGINAR.

Sólo me resta darles las gracias, por el apoyo, por que sigan viviendo conmigo toda esta magia que tiene IMAGINE ME, les dejo besos y recuerden ENAMORENSE, TODAS LAS VECES QUE PUEDAN.

P.D. un agradecimiento muy especial a Clau y a Eli, que me siguen, gracias por su apoyo!!!!