domingo, 18 de marzo de 2018

¿Qué sabes de amor?


¿Qué sabes tu de amor, si aún no has pisado la luna con los pies descalzos una noche de julio mientras cazabas mariposas?

¿Qué sabes tu de amor, si no has llorado por la sed de besar lo que aún no podés tocar?

¿Cómo puedes decir que amas, si a tu piel no le ha dolido la distancia?

¿Cómo te atreves a hablar de amor, si tus manos no se han entumido de ganas de acariciar otra piel en una helada mañana de enero?

Dime, ¿cómo se puede hablar de amor con las manos vacías de fe?

No me juzgues mal, no digo que tu amor, no valga, pero es más fácil amar lo que se conoce, lo que ya se sabe, lo que ya se ha visto.

Yo escribo sobre ese amor que ha sobrevivido al tiempo, a la muerte, al olvido, a la distancia, un amor que es a prueba de todo y de todos; por eso cuestiono las formas sencillas de amar, y me pregunto si es tonto o absurdo amar lo desconocido, sí, lo sé, tal vez ni yo lo tengo claro, pero lo siento, lo respiro, lo palpito y si, por si lo preguntas, también en la distancia la piel se humedece.

Dime tú, ¿qué sabes de amor, si no has tenido la oportunidad de amarlo a él?

No hay comentarios:

Publicar un comentario