lunes, 11 de abril de 2011

Continuar

Después de haber pasado más de 15 minutos suspirando mientras miraba el fondo de escritorio de mi computadora, decidí que era el justo momento para sentarme a escribir, son las cinco y media de la tarde, para esta hora mi habitación esta un poco mas fresca, el ventanal que adoro cuando la luna esta a pleno y se cuela por mi ventana, en épocas de calor se vuelve la puerta perfecta de un extraño horno de microondas y obviamente yo me convierto en el plato que se calienta dentro de este horno jeje.
Bueno esa siesta de la cual recién despierto creo que no fue buena idea, me hará dormirme tarde, sólo espero terminar las horas de energía escribiendo algo verdaderamente digno de ser mostrado al mundo a través de IMAGINE ME.
Creo sin temor a equivocarme que justo en este párrafo muchos se preguntan, ¿ahora, cual es la razón que la anima a escribir, sobre que escribirá? y la respuesta es, hablare sobre los sueños rotos, los amores en olvido y sobre mi decisión de llegar a la luna.
Bueno hice una larga pausa antes de continuar con este escrito, la razón, decidí arreglarme, me duche, me cambie de ropa, me coloque un delicioso perfume que me obsequiaron en mi cumpleaños, me maquille, pinte mis labios con un suave tono rojo, mis pestañas lucen largas y mis mejillas son rojas y no por efecto del rubor, yo me sonrojo como signo de nervios, cuando alguien me gusta y lo tengo frente a mi, cuando me siento alagada, cuando coqueteo... siempre delatan mis intenciones; me recogí el cabello, sé que pocas veces lo hago aunque me gusta la caída que tiene y como esta ocasión es especial, decidí usarlo así; prepare una taza de café y ahora ya estoy lista para esta nueva cita... adelante, toma asiento, gracias por venir...
Sabes estuve recordando (a la par que miraba unas fotos que un muy buen amigo me envió) a aquel hombre que dejo de amarme y haciendo un análisis -lo mas objetivo que pude, si es que esto es posible- y creo  que fueron muchas veces las que le reclame haberse ido, le reclame que no me amara con la misma intensidad que yo lo ame, pasé mucho tiempo reprochándole que no se decidiera a ser feliz conmigo, en fin, todo este tiempo creí que él tenía miedo a vivir... y entre este “análisis” de reclamos llego una frase que alguna vez leí en algún lugar y que en el momento en que la use  tontamente creí haberla entendido -ahora sé que no- y decía mas o menos así "amar es desear el bien… conmigo o sin mi", y creí que se refería solamente a el hecho de aceptar la  nueva situación en el amor, ya saben “él no me quiere…”,  pero no, es algo mas profundo, es sobre entender, sobre avanzar y sobre dejar ir situaciones que no contemplamos, y en mi caso situaciones que ni siquiera me di a la tarea completa de entender.
A cuántos nos ha pasado que creemos que "dejamos ir" sin cerrar la puerta, sin curar heridas; cuantos de nosotros dejamos ir, sin dejar ir...
A  veces torpemente pensamos que al borrar o romper fotos,  las imágenes también se rompen en nuestra cabeza, nos compramos la idea de que al eliminar contactos o romper cartas nunca mas volveremos a leerlas, y por segundos olvidamos o mejor dicho “conscientemente” omitimos recordar que las llevamos  guardadas de memoria pues en su momento las leímos mas de veinte veces.

Y de igual forma sucede con las canciones, las borramos o las dejamos de escuchar por que en alguna extraña dimensión nuestros sentimientos confían quede esta forma ese personaje que marco nuestras vidas, se ira de nuestros recuerdos; pero olvidamos una vieja regla de la vida que dice: que el  que te  deshagas de todas las cosas que lo traen a tu mente no significa que desharás del sentimiento que es el a fin de cuentas te hace recordar.
Es por ello que todo esto no es suficiente para olvidar o para dejar ir, y menos si a la menor provocación evocamos su recuerdo, no funciona decir "NO PENSARE", mientras te amarras las manos intentando no escribirle una entrada mas en un bello blog que tiene como fondo a  la luna; no funciona cuando deambulamos por la vida  con los fantasmas del pasado y nos rehusamos a dejalos ir por que los convertimos en compañeros inseparables  que nos sirven como consuelo, que mas da si el fantasma nos recuerda o no, si con nuestro sentimiento basta y sobra para irradiar amor por dos.
Tengo aún la foto de fondo y luce tan bien, esos colores le sientan tan bien, se ve mas guapo, mas joven, esa mirada tierna como de niño perdido es lo que mas me atrapa, sus manos fuertes, grandes, masculinas... se ve tan bien... Lo miro y lo único que viene  a mi mente es una sola pregunta ¿qué hago mientras tú me olvidas?... me hubiera gustado que desde su última partida yo encontrará un manual de "como sobrevivir a la partida de... en una sola semana", pero creo que no existe.

Para mí lo único que hay de cierto en todo esto es que él sólo sabe hacer que lo ames, pero no que lo olvides, él sólo sabe hacer que lo adores, pero no sabe hacer que lo odies -por mas razones que existan para hacerlo, las que sabe que sé y las ignora que las sé-, él no sabe mas que eso, bueno, sabe eso y sabe continuar con su vida, saber como avanzar... así que espero que en esta vuelta me enseñes a olvidar como tú me olvidas.
Recuerdo las veces que me costaba trabajo respirar con solo nombrarlo, la luz que irradiaba de mis ojos al verlo era tan intensa, las palpitaciones de mi corazón al ritmo de su dulce, gentil y segura voz eran tan fuertes que a veces me sentía avergonzada de sólo pensar que las escuchara cuando hablábamos por teléfono, también sé que  él no sabe de titubear, es firme y seguro, sí, así es él; lo que no sé es si lo suyo es un don o simplemente  sabe conquistar, no es un tipo ordinario, esta lleno de pasión, pero a la vez es ternura, es locura, es sueños y realidad… eso es él.
Querido lector, así ha sido el amor suyo y mío, un amor de ausencias, de regresos, de pasión, de muchas lunas y de tantas vidas... ese es nuestro amor, así era nuestro amor y ustedes son testigos del trabajo que me ha costado salir adelante de este sentimiento, dejar de sufrirlo ha sido mi mayor deseo, tanto es que los he hecho  participes de mis intentos fallidos no por olvidarlo, sino por dejarlo de amar -a cuantos les a pasado o les pasa lo que a mi-.
Pero después de todo este tiempo y de tantas promesas que no me cumplí... no lo deje ir, vivía en mi y respiraba el mismo aire que yo, le hablaba por las noches y le permitía hacerme el amor de vez en cuando… así aprendí a vivir – estúpidamente así diseñe mi vida- sin embargo ahora entiendo que lo que no murió fue mi amor por él y lo que termino fue su amor por mi… él avanzo y yo me quede ahí mirando la luna y esperando un regreso mas, y es que por mi cabeza jamás paso la idea de que existía la posibilidad de que volviera acompañado, si, olvide pensar que eso podría pasar, que él continuaría sin mi.
Y así ocurrió, él tiene una vida y la pasa genial y soy tan feliz por ello -no a modo de consuelo, soy mas que eso- me da gusto y me llena de orgullo que tenga tantos planes, que tenga un nuevo proyecto de vida, me encanto verlo bien y es por ello que recordé que me había encargado de reprocharle lo que no había querido vivir, en lugar de entender y aceptar  que sólo NO se decidió a vivirlo conmigo; él nunca renuncio a su derecho de CONTINUAR, él sólo decidió continuar viviendo PERO SIN MI, (aquí es donde me cae el balde de agua fría) y aquí es  donde esta el punto realmente importante de esta entrada, por que viéndolo bien, el que no escribiera una historia conmigo no significo que no tomara la decisión correcta para él, es obvio que para mi  no fue la mejor - hasta hace algunas horas- pero para él, si fue una gran decisión continuar sin mi.
Muestra de lo anterior es lo genial que esta y por ello doy gracias de que continuará, de que viva y de que no se detenga, quiero que corra –con cuidado- y se adueñe del mundo… total es todo suyo.
Creo que esta nueva información que llega  a mi cerebro amerita otra ronda de café, ¿no crees, querido lector?
Debo contarles que este café duró más de tres días, duró una mala noticIa, un temblor de baja intensidad y las horas de mi viaje con boleto a mis orígenes… y  lo bueno es que después de esto me di cuenta por fin que de un modo extraño y seguramente para algunos tal vez patético o triste, yo también continúe sin él.
Mi saldo ha sido un Son alegre y con sabor a celos, un chocolate a la luz de la luna que se convirtió en la taza de café que bebes en las tardes de frio cuando lleve y quieres platicar, noches con música de fondo y ahora con un poco de suerte tal vez pueda escribir sobre un próximo viaje a la luna, si es que deciden llevarme…, muchos escritos, muchas canciones, muchas fotos, grandes y adorables amigos, mi Ángel de regreso y  la seguridad de que lo mejor esta por suceder.
Gracias por leerme.
Besos y saludos.

1 comentario:

  1. Vanessa:

    Después de varios días queriendo pasar por aquí, y sin poder hacerlo, por fin me tomo el tiempo para sentarme a comentar en tu blog como se debe.

    Me encantó esta entrada, desde como empezaste a describirla, me pareció ver todo como si fuera una película que no sólo los que te leemos vemos, sino en la que tu misma te visualizas como protagonista y analizas cada uno de tus movimientos y de tus acciones.. Creo que no todos tenemos la capacidad para hacer eso y sería un ejercicio interesante el poder hacerlo.

    Por otro lado, entiendo perfecto el sentimiento que describes el dejar ir a alguien y tener que asumir -tal vez haciéndote a la idea para que sea lo menos doloroso posible- de que esa persona tomó la decisión de vivir su vida sin ti.

    Si cuesta tiempo aprender a olvidar, pero seguramente algo viene para ti mucho más grande y bueno, y podrás sentarte a tomar un café y disfrutar de la tarde, del calor y de todo eso que te hace ser una mujer tan sensible y expresarte y describir imágenes de la forma que lo haces aquí.

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