Este post estaba pendiente, pero ya que el protagonista me acompaña con música, es justo que lo termine, como muestra de gratitud por permitirme conocerlo y celebrar que en tan poquito tiempo hemos llegado a ser ya buenos amigos y a modo personal esperando que sea el inicio de una larguísima amistad.
Lo primero que tengo que hacer para iniciar esta entrada es darte las gracias por esos comentarios tan maravillosos, que aun no respondo por que me da pena, jeje son tan buenos que temo arruinarlos con algo que no este a la altura, así que me disculparas si sólo los leo y los disfruto.Y así es como la noche comienza con tu música favorita, " mi grupo favorito de por vida", eso me dijiste, y de aquí parto para escribir sobre uno de nuestros temas favoritos: la música, esa mujer de largas horas que enmarca momentos de nuestras vidas; la acompañante fiel de los largos caminos y de las jornadas cansadas; la seductora amante de las noches de pasión.
Los minutos se nos van entre risas y buena música, muy buena por cierto; me alegra tener a tu grupo favorito de fondo, lo estoy disfrutando mucho, y es justo aquí donde pienso en eso que "comentamos", después de permitirme documentarme de la forma que lo hice gracias a ese gran trabajo tuyo, recuerdas que entre las miles de alabanzas que hice hacia tu persona, en algún punto coincidimos en que la música esta en todas partes y es la única "cosa" capaz de guardar dentro de si un arcoíris de sentimientos, a través de ella se puede sentir alegría y dolor en una sola nota, a veces una simple frase acompañada de acortes es capas de partir de la simple evocación de recuerdos, pasando por una lágrima que es capaz de recorrer la mejilla y desaparecer entre los labios, hasta culminar en el total y desgarrador llanto.
La mágia que envuelve a la música es independiente del genero, de la letra, del ritmo, pues por lo menos para mi, en una sola canción pueden existir una gran variedad de emociones; pongámonos a pensar, cuantos de nosotros no hemos llorado escuchando la música que nos recuerda a la persona que partió dejándonos el corazón roto; cuantos llegamos a desgarrar nuestra garganta para sacar la furia de la traición a través de una rola de despecho, quien de nosotros no ha suspirado cuando alguien te dice " la que sigue es para ti", existirá alguna persona a la que no le tiemblen las piernas o se estremezca con una canción de amor. Esa es la magia del idioma universal, el hacernos sentir con cada nota.
No sé si este post tenga sentido para mas de dos personas, pero es un buen ejercicio a nivel personal, tengo el efecto distractor (jajaja Enrique!!) y no pretendo llegar a un punto, sólo es una entrada caprichosa entre amigos que decidieron desvelarse con música de fondo.
Como le comentaba a mi amigo a quien considero mas que conocedor de música, especialista, que la mayoría de estas entradas han sido escritas con música de fondo, pues para mi la música es un elemento fundamental, para sentir, para recordar; me ayuda a pensar y a ordenar mis ideas, como ahora lo hace esa hermosa música que tengo de fondo "The Kinks - Helga", me llena de una tranquilidad y me inunda una profundo deseo por no parar de escribir, me pide entre notas que continúe, que haga todo lo posible para que quienes me leen tengan deseos de abandonar esta lectura y concentrarse en la música de fondo, que intente que redescubran el mensaje que tiene para cada uno la música que escuchan en este preciso momento, así que querido lector no molesto mas con tanta escritura y te invito a pasar este momento (sea, la hora que sea) escuchando esa música que le da movimiento a tus días.
Gracias por tu tiempo!!!
Besos a todos, Feliz Doomingooooooooooo!!!
A manera de comentario, que a lo mejor no encaja mucho con tu escrito o la mejor si, pero es una anécdota personal: La música igualmente para mí ha sido determinante en todo lo que soy y he sido, y han existido varios momentos digamos clave: uno de ellos fue cuando a mi adolescencia escuche una madrugada el disco: "At night at the ópera" de "QUEEN", y solo puedo comentar que mi vida y la persepción del mundo que hasta ese momento me pertenecia, se había sublimado al máximo, otro momento cumbre fue cuando también por esos años de adolescencia, me dirigí caminando con ansiedad a la tienda de discos más cercana en aquellos lejanos años, y aunque en otros momento hubiera yo tenido duda en la elección del disco por comprar, esa ocasión, no fué así, yo tenía claramente la idea de adquirir el único disco que en ese momento (en mi entorno) se podia adquirir de "THE KINKS", era un disco de éxitos, regresé rápidamente a casa, y como se acostumbraba abrir los discos de acetato, talle con cuidado el borde del plástico para que la portada quedara perfectamente cuidada, coloqué el vinyl (jeje) en la vieja consola "telefunken", y a partir de ese día ya nada volvió a ser igual, a lo largo de los años la colección se fue acrecentando hasta llegar a ser la mayor, considerando que de la época fué uno de los grupos más prolíficos, y bueno la razón de mi devoción por ellos no fue solo la música, alegre, juguetona, pero dura, era además el mensaje, letras que canción a canción abrían nuevas inquietudes, caian muchos veintes, honestidad, coherencia, denuncia, comprensión, todo eso encontraba en ese grupo, que hablaba a veces no de la rebeldia de los jovenes, sino de la preocupacion de una madre porque su hija no regresaba a casa, o del estoicismo de un marido a quien su esposa engañaba, o la angustia del niño atormentado por sus maestros y compañeros en la escuela, en fin "The kinks" es como para llenar un libro de comentarios y agradecimientos de mi parte...
ResponderEliminar